Una IP es una dirección lógica de 32 bits que identifica a un dispositivo en una red. Se representa mediante 4 números decimales separados por puntos; números que pueden variar entre el 0 y el 255. Cada dirección está compuesta de 2 partes: identificación de red (todos los dispositivos que pertenecen a la misma deban llevar el mismo identificador) e identificación de host (identificador único para cada dispositivo en cada red).
Estas partes vienen diferenciadas entre sí por la máscara de subred, que también es una dirección lógica de 32 bits compuesta por 4 números separados por puntos pero con una lógica más simple. La parte que identifica a la red lleva el valor alto (el 255 normalmente o el 1) y la parte que identifica al host lleva el valor bajo (el 0 normalmente).
Entre la clase A y la B el rango 127 no se cuenta. Esto es debido a que la dirección 127.0.0.1 es utilizada por cada host de manera local, para comunicaciones entre dispositivos de la propia máquina, por lo que no está disponible al resto de la red.
La clase D no se debe utilizar para identificar a una estación, ya que se utiliza para la difusión de "mensajes" a grupos de máquinas.
La clase E fue una extensión del direccionamiento IP pensado para utilizarse en un futuro por falta de IPs, no obstante el siguiente paso es la versión 6 del direccionamiento IP, llamado IPv6.